19 may 2010

Cadáver exquisito

Ojos que desprecian la honestidad del corazón
puños que golpean lo que te quede de ilusión
no hay salida cuando una soga aprieta tu cuello
y temes morir asfixiado por tu propia sangre.

En la casa oscura de tu memoria,
percibiendo el aire recorrer la cama en que se ha
convertido tu cuerpo,
sientes el olor a muerte en tus dedos.

La ausencia maniaca penando
el olor de lo que fue
en recuerdos de sombras
augurando miradas sorpresivas

desde el ángulo más oscuro de mi cuerpo
en el hervor incansable de mis ganas
tú una y otra vez ciclicamente
calcinas mis huesos y mi carne.

Pronto seré la ceniza que tires, no me importa
de cualquier modo entraré sin permiso
confundido con el viento y rozando tus piernas
hasta la humedad que a mi cuerpo moldea

a esta oquedad primigenia en que esculpes mi espina,
redondeas mi pecho y cincelas cada uno de mis dedos
llega tu voz,amanecer abisal, chispa del origen
y me convierte en explosión de partículas
que danzan para concebirme de nuevo
a tu voluntad, imagen y semejanza.

Un viento frío azota por la ventana de mi cuarto
y el canto triste de un pájaro anuncia tu llegada
si es tarde o demasiado pronto, qué no importa
los dos somos lo mismo:también la muerte.

Estamos en la pluma del olvido,
en la curva rencorosa de demoledora soledad e insistencia.
en el supurante calor de la palabra olvido
que es equinoccio en el tiempo, dulce arrabal.

Que arrastra las sonrisas desgarrando la piel de tu santuario
triturando el vientre virginal,
temeraria la lengua
bordando las rutas del descenso.

Las mariposas negras han dejado de caminar
hoy habitan el pasado mañana.
se arrancan la lengua de espiral.
y se niegan al descenso de su clandestinidad.

Y no retroceden, regresan, se vuelven uno
corrompen la tranquilidad de dios
provocan a los ángeles caídos
y vuelven a caer a la obscuridad del caos

en el desplome total
la fundación de esta ruptura irresoluble
cede la fé ante el monstruo
dominando la consagración de la fractura

del suelo levanto los pedazos de mi,
algunos escapan por la ventana.
No pretendo seguirlos, hay cosas que no puedo
(como olvidar que ayer aún me amabas).

3 comentarios:

Emma Mogador dijo...

jajaja, que azotados somos eh!!!
creo que la idea sí gira en un solo tema. Eso hay que reconocerlo pero, de que somos azotados, lo somos. Saludos a todos, desde la comarca lagunera

Christian dijo...

Si, anda azotadon el exercise...

Ela bigail dijo...

me gustó :D